Por Laura Lee Santamaría
Sergio Guillermo Diaz es un dibujante y pintor salteño que se hizo viral en el último tiempo por plasmar sus obras en pequeños espacios, nada más y nada menos, que en billetes devaluados.
Rostros de personajes como el Joker, Baby Yoda, la Princesa Leia, e incluso figuras inconfundibles como Leo Messi o Freddie Mercury, son solo algunas de las obras que más trascendieron. Pero como él mismo explica, hace mucho más que pintar solo billetes. En la cuenta del artista que supera los 20 mil seguidores en Instagram, podemos encontrar dibujos en grafito, pinturas de acrílico sobre lienzo, acuarelas, entre otros.
En entrevista con abc, Sergio pudo compartir su pasión:
¿Cómo te describirías como artista?
Me gusta la definición que tengo en mi Instagram dibujo y pinto cosas…
Creo que lo mejor que me define es ver y seguir mi trabajo que, aunque se viralizó por los billetes, abarca mucho más.
En mis obras más allá de una cuestión técnica se puede encontrar un mensaje, una idea que abarca temas que van desde la ecología, los conflictos sociales a lo religioso, siempre desde una lectura ambigua, irónica y con algo de humor.
¿Qué te inspira a la hora de crear una obra nueva?
Siempre parto de una idea previa, algo que intento decir y luego está la forma, muchas veces recurro al humor o el absurdo para plantear ello. También me gusta ver qué hicieron algunos artistas respecto a ese tema, como abordaron esa idea.
Luego a la hora de bocetar, puede que empiece con garabatos, algo muy esquemático en papel para después plantearlo en algún programa de edición en la PC. Armar el boceto final allí, me facilita mucho el trabajo a la hora de hacer cambios y ajustes, aparte que me da una idea aproximada de cómo quedaría el trabajo finalizado.
¿Cómo se te ocurrió empezar a pintar billetes?
Fueron varias las situaciones que me llevaron a esto. Empecé en el 2017, cuando los billetes de dos pesos ya no tenían valor, prácticamente eran dos caramelos. Pero también hubo cuestiones personales y otras que tenían que ver con mi obra previa.
Se dio que para esa época, estaba transitando mi segundo año de paternidad, con todo lo que ello implica, el tiempo que demanda una hija los cambios en casa y el ritmo de trabajo, me llevó a pensar en una obra rápida y en pequeño formato. También por otro lado, todo mi trabajo previo se basaba exclusivamente en el dibujo, quería volver a pintar, pero pintar aquellos personajes del mundo de la ciencia ficción y los cómics que es algo que me gusta desde que soy chico.
Así que fue un mix de cosas que se juntaron para llegar a esto, que no es nada nuevo, solo que en mi caso quise intervenir billetes desde mi labor con pintor y dibujante y convertirlos en pequeñas obras que sobrevivan a la inflación.
Tenés muchos seguidores en Instagram, ¿cómo es tu interacción con la gente?
Lo de las redes es increíble, soy consciente que no he alcanzado el máximo provecho respecto a ellas. Implica mucho tiempo, intentar generar contenido e interactuar, es otro trabajo. Y por ahí me cuelgo mucho en pintar o dibujar.
Pero estoy muy agradecido con la gente que me sigue, por el alcance que ha tenido mi trabajo y en los lugares en los que he podido participar gracias a ellos.
¿De chico tenías en claro que querías dedicarte al arte?
Desde chico me interesó todo lo relacionado a las artes y en casa tuve mucho estímulo para ello. Fui a varios talleres de dibujo, pintura y cerámica.
Si bien creo que siempre tuve la idea de ser artista, de grande y ya habiendo transitado una educación terciaria, tus ideas cambian y pensás que es más difícil ser artista o ser reconocido por ello. Más allá de todo eso, hay algo que siempre seguí haciendo desde chico y fue dibujar y pintar sin pensar mucho a dónde me llevaría.
¿Cuál es el camino del artista? ¿Cómo se convierte en algo rentable?
Es difícil ser exclusivamente artista y vivir de ello, en mi caso también trabajo en el museo de arte contemporáneo de la provincia. Y aunque no es mi única fuente de ingresos si es una parte importante. No es que no se pueda vivir del arte, hoy en día tenés muchas herramientas que te posibilitan dedicarte a ello y potenciar tu trabajo. Creo que también es una cuestión de dedicación como cualquier profesión.
¿Sos perfeccionista? ¿Te cuesta dar por terminada una obra?
Muchas veces realizo cambios durante la marcha, si bien tengo siempre un boceto que me acompaña, el trabajo final se aleja un poco de él, ya que es otro medio y muchas veces la obra necesita ajustes que solo los ves una vez que ya tenés la obra planteada. Cuando la «finalizo» por lo general la reveo para darle el último visto bueno. De todas formas, siempre queda algo pendiente, que podría haber sido distinto.
¿Dónde pueden ver tus creaciones? ¿Haces exposiciones?
Si realizo exposiciones, aunque la mayoría colectivas, mi última expo individual fue a fines del 2019. Actualmente la demanda que tengo hace que el trabajo más personal se vea muy reducido, y no llego a contar con un número de obras para una exposición individual. Por eso subo la mayoría de mi trabajo a las redes, es una forma de exponer y mostrar lo que hago.