Por Lic. Victoria Duran Nutrición M. P 262
Licenciada en Nutrición, especialista en educación terapéutica. Diabetes, obesidad y deporte.
¿Escuchaste hablar de estrategias punta de ovillo?
En la actualidad, es sorprendente ver la cantidad de personas que llegan al consultorio con la intención de probar distintos tipos de dietas. La mayoría de estas dietas carecen de indicación médica y se centran en objetivos estéticos como la pérdida de peso y la reducción de la hinchazón. Sin embargo, estas elecciones pueden tener consecuencias a largo plazo que aún no se conocen ni se divulgan. Solo los especialistas analizan rigurosamente cuándo es necesario indicar un tratamiento específico.
Hoy en día, la información sobre nutrición está al alcance de todos. Las redes sociales, tanto de profesionales como de no profesionales, están inundadas de consejos sobre alimentación. Además, contamos con la ley de etiquetado frontal, que después de varios años ayuda al consumidor a tomar decisiones más informadas al hacer sus compras.Pese a estos avances, seguimos viendo un aumento en los trastornos relacionados con la alimentación. Personas que excluyen grupos de alimentos como los carbohidratos o el gluten, sin necesidad médica, a menudo enfrentan problemas a largo plazo. Por ejemplo, algunos desarrollan intolerancias debido a estas restricciones no supervisadas. Situaciones como estas se observan con frecuencia en la vida diaria.
¿Y si volvemos a las bases?
Es crucial recordar que cada uno de nosotros es único. Por lo tanto, nuestras elecciones alimenticias deben ser suficientes, variadas, completas y adecuadas para nuestras necesidades individuales. La nutrición no se limita al papel funcional de los alimentos en el cuerpo. También abarca los aspectos psicológicos, emocionales y ambientales relacionados con la alimentación.
Es triste ver a jóvenes que no pueden disfrutar de una merienda con amigos por preocupaciones sobre su apariencia. De manera similar, hay personas que enfrentan sentimientos de culpa después de comer una comida indulgente. En el otro extremo del espectro, muchas personas recurren a la comida como una forma de lidiar con la ansiedad, la soledad o el estrés.
Entonces, ¿cómo podemos regresar a las bases?
Comencemos con las «estrategias punta de ovillo». Estas son acciones que nos ayudan a iniciar un proceso de cambio en nuestra relación con la comida y la nutrición. El primer paso es cuestionar si los objetivos que nos planteamos son adecuados para nuestro momento actual y nuestras necesidades biológicas. A medida que evolucionamos, es importante ajustar nuestros objetivos con la ayuda de profesionales.
Consideremos también otros factores que influyen en nuestros hábitos alimenticios. A menudo, problemas como el sedentarismo, los cambios en la rutina diaria o las circunstancias personales pueden ser los verdaderos desencadenantes de los problemas de alimentación. Un enfoque integral implica abordar estos factores además de la dieta.
El entorno juega un papel fundamental en nuestra relación con la comida. Crear un ambiente seguro implica identificar las influencias familiares, las dinámicas de compra de alimentos y los hábitos de comer. La educación alimentaria y nutricional nos proporciona las herramientas para mantener cambios pequeños pero significativos a largo plazo.
¿Qué tan importante es realmente el objetivo que nos hemos fijado en cuanto a la alimentación? ¿Estamos dispuestos a hacer lo necesario para lograrlo? A menudo, enfrentamos obstáculos internos que nos impiden tomar acciones coherentes con nuestros objetivos.
Una vez que hayamos explorado todos estos aspectos, estaremos listos para embarcarnos en un camino hacia un estilo de vida más saludable. Esto puede implicar mejorar nuestros hábitos alimenticios, aumentar la actividad física o abordar aspectos emocionales con la ayuda de un profesional.
En resumen, siempre es recomendable consultar a un médico que pueda derivarnos al especialista adecuado. No debemos creer todo lo que leemos ni seguir ciegamente los consejos de amigos o influencers. La clave está en volver a las bases: optar por alimentos naturales, reducir los productos procesados, disfrutar de la comida en compañía y planificar nuestras comidas de manera inteligente.
Sería importante VOLVER A LAS BASES, donde cada uno es un ser único, por lo tanto, la alimentación debe ser SUFICIENTE, VARIADA, COMPLETA Y ADECUADA.
Nuestro equipo de especialistas en el Centro Medico de MAS en San Lorenzo Chico está altamente capacitado para acompañarte en este proceso de mejorar tu calidad de vida. Tu bienestar está en nuestras manos, te invitamos a sacar turno al 3875600466 o visitar nuestra página web massalta.com.ar. Te esperamos.