Por Gabriela Parentis
Los quince años son sinónimo de una gran celebración para las jóvenes. Significa, para muchas, una ocasión monumental de festejo con amigos y familiares.
Aunque seguimos viviendo con algunas restricciones en los encuentros sociales, hoy estos están autorizados y festejar un año más de vida implica un verdadero desafío. Por eso conversamos con Cristela Russo, productora de eventos, quien nos brindó los detalles del cumpleaños de 15 de Francisca, que se realizó de manera diferente y ¡fue un éxito!
“Todo comenzó cuando tres semanas antes de la fecha me llama Belén Franzini, mamá de Fran, la cumpleañera; nos reunimos y el pedido fue: necesito hacerle algo sorpresa a Fran por sus 15 que esté dentro de lo permitido en el contexto de pandemia, algo muy muy lindo y que no se lo olvide jamás.”
El trabajo de Cristela y su equipo se basa muchísimo en la creatividad y, en este año y medio tuvieron que maximizar este recurso más que nunca. Es así como, en cada caso, la creatividad se pone en marcha gracias a la conjunción de muchas variables que son particulares de cada situación. Aquí debieron tener en cuenta, entre otras cosas, las restricciones, las características del lugar a elegir, el día y el horario en que debían hacerlo, las tendencias e intereses de los asistentes y, sobre todo, los gustos de la cumpleañera.
Así fue que surgió la idea disparadora de hacer un té, pero debían adaptarlo y sumarle valores agregados, trabajando el concepto de que sea una VIVENCIA de las chicas con una secuencia de actividades desde el momento de su llegada.
De esta forma, comenzaron trabajando sobre un hilo conductor inicial: el color en la gama de los rosados, rosa gold, nude, etc., y en la incorporación de muchísimos detalles en la ambientación, el catering, las actividades y regalos.
Todo fue pensado y producido respetando la personalización del evento.
El día de la celebración
Desde el momento en que llegó Fran (engañada porque jamás se imaginó nada de esto), se encontró con todo el montaje más la compañía de sus amigas.
Disfrutaron del jardín con frescos cócteles sin alcohol, hechos con frutas naturales, luego unas sesiones de fotos, merienda en formato picnic y cerraron con una clase magistral de maquillaje con la experta Vanina Villar, en la que cada una tenía su lugar con su kit de maquillaje que luego se llevó de regalo, entre otras cositas más…
Todo fue sumamente pensado, planificado y cuidado
“Para mí, lo más importante de este evento fue la libertad con la que pudimos trabajar gracias a la gran confianza del cliente en dejarnos hacer y, sin dudas, considero que logramos el objetivo de que fuera una experiencia inolvidable tanto para Fran como para sus amigas”, aseguró Cristela Russo.
Y agregó: “Esto es un fiel ejemplo de lo que implica la producción de un evento, que no es simplemente el contratar varios proveedores, recurrir a Pinterest y asistir con una sonrisa a coordinar un evento.
En este ejemplo se demuestra todo el trabajo previo que conlleva el producir un evento a medida del cliente: horas de investigación, de creatividad, de diseño, de planificación, de búsqueda de elementos ya hechos o de tener que mandarlos a hacer, de selección de los servicios que queramos implementar, pero que la gran mayoría de las veces hay que adaptarlos a la situación diseñada.”
La experiencia de Cistela Russo
Hace más de 20 años que se dedica con mucha pasión a esto, jamás deja de aprender, de estudiar, de actualizarse con las nuevas tendencias en diferentes rubros, porque de todo algo siempre se aplica a los eventos.
Según su percepción, es sumamente importante el networking con colegas y gente del rubro de otros lugares y países… como también las reuniones de equipo para transmitir, compartir y debatir ideas que los enriquecen a todos.
“Nuestra función en un evento se torna cada vez más importante y debemos comunicarlo con mucho énfasis porque somos quienes tenemos el conocimiento del tema, la experiencia y podemos aportarle infinitos beneficios al cliente: desde el más visible que es el que puedan disfrutar del evento sin tener que preocuparse por nada hasta variables como creatividad, funcionalidad, búsqueda de proveedores o servicios más adecuados para el evento, planificación, previsión de imprevistos, consideración de normas de seguridad, resolución de conflictos, negociaciones y maximización del presupuesto que no es un tema menor hoy en día.”
Claves para el éxito de un evento:
– Elegir un buen organizador de eventos con experiencia que sea la cabeza de todo lo que sigue después.
– Selección de buenos proveedores que trabajen con normas de seguridad cada uno en su rubro.
– Creatividad en armonía con funcionalidad.
– Sentido de responsabilidad.
– Trabajo en equipo y buena onda siempre.
Hoy por hoy, lentamente logramos ciertas flexibilizaciones que todavía no son la misma normalidad que vivíamos antes, pero debemos ser muy conscientes y respetuosos de esto.
Es importante destacar que la tendencia para diferentes tipos de eventos, ya sean cumpleaños, casamientos o eventos corporativos, es la incorporación de mucha tecnología y Cristela considera fundamental que la gente sienta que está vivenciando un momento que fue pensado y planificado para ellos.