Por Gabriela Parentis
La duquesa de Cambridge, Kate Middleton, dejó al mundo entero sorprendido luego de su aparición en la premier de la película “No Time To Die”, la última entrega de “James Bond”.
En un evento de este tipo, sabemos que podemos deleitarnos con looks dignos de una alfombra roja, pero no esperábamos que Kate se lleve todas las miradas. Era sabido que Ana de Armas iba a eclipsar Londres con su outfit, o que Daniel Craig no iba a defraudar con su elegante estilismo, lo que no nos esperábamos era ver a Middleton con un look digno de una estrella de Hollywood.
La Familia Real inglesa ha querido apoyar el estreno de la nueva entrega de 007, el agente que más conoce a los miembros de la corona británica, es por eso que los duques de Cambridge, siempre elegantes y espectaculares asistieron al encuentro junto al príncipe Carlos y Camila Parker Bowles.
Al mejor estilo Hollywood, los invitados desfilaron sus looks para las cámaras. La que literalmente brilló, fue Kate, que eligió un vestido de Jenny Packham en tono dorado, con capa de lentejuelas y gasa integrada. Un diseño que a los fieles seguidores de Lady Di les recordó al que la princesa lució en otra de las películas del famoso agente secreto en 1985, “A view to a kill” entonces, Diana de Gales llevó un vestido de lamé en tonos dorados, tableado y con hombrera, diseñado por Bruce Oldfield.
Casual, de diario o para un evento más especial, Kate nunca deja indiferente a nadie con sus estilismos. Generalmente solemos ver con el pelo suelto, aunque en esta oportunidad atrapó al público con un sofisticado recogido y unos llamativos pendientes dorados circulares de O’Nitta London, también llevo un anillo de cóctel citrino y zapatos metalizados en dorado, de Aquazzura.
Segundos después de este primer momento de pareja, el príncipe británico hizo otro gesto espontáneo que terminó de enloquecer a los usuarios. Luego de mirarla una vez más, se lo ve a William mordiéndose el labio en una clara actitud pícara de deseo. Un pequeño movimiento casi imperceptible que provocó que las redes sociales se convirtieran en una cartelera de mensajes de alegría por ver a una pareja tan enamorada a pesar del paso del tiempo.
El London´s Royal Albert Hall fue el escenario además de momentos muy románticos entre Kate y el príncipe William, los dos se dejaron capturar con miradas cómplices, contemplando la belleza del otro de arriba hacia abajo. Particularmente, el príncipe británico se llevó el protagonismo en las redes cuando hizo un gesto espontáneo que terminó de enloquecer a los usuarios: se lo vió mordiéndose el labio en una clara actitud pícara de deseo. Un pequeño movimiento que no pasó desapercibido.
Ya sea con este vestido de lentejuelas o los cásicos trajes de la duquesa, no podemos cuestionar que Kate domina perfectamente las tendencias durante las 24 horas del día y en todos los eventos que requiere su agenda. ¡Como royal es maravillosa!
