La altura de los viñedos, el clima, la amplitud térmica, los rayos ultravioletas de la zona y la tierra hacen que los vinos de Bodega Puna tengan características únicas. Por esto, su construcción debía ser del mismo nivel. La responsable de llevar adelante este proyecto fue la empresa Invlac Construcciones, quien, atenta a los pedidos del cliente, consiguió la ejecución de una obra magnífica.
Por Ing. Víctor Laconi
CEO INVLAC Construcciones
Se trata de un edificio destinado a albergar dos actividades que, pese a estar relacionadas, son bien distintas. En un sector, una bodega destinada al procesamiento de vino de altura con uvas del lugar. En el otro, se aloja un sector turístico dotado de salones de usos varios, destinados a recibir visitantes de diferentes lugares. Es por eso que la construcción de ambos edificios fue muy distinta.
El primer sector constituye una nave industrial dividida en partes según la necesidad de la bodega, donde se recibe la uva y se inicia el proceso de fabricación del vino. Luego, en otros salones de la misma nave se procede al almacenaje del vino ya procesado. Este almacenamiento tiene lugares en tanques de acero inoxidable de gran tamaño, unidos mediante cañerías y pasarelas necesarias para el proceso.
Finalmente, el edificio alberga un sector destinado a barricas de madera para el añejamiento, más un sector de embotellado, el cual necesita espacio especial para alojar las cintas transportadoras que llevan las botellas a cargar el vino y posterior encorchado.
Es importante destacar que este espacio se ubicó sobre un terreno con un gran desnivel, por lo que el sector sobre la ruta se encuentra mucho más alto que el sector sobre los viñedos.
Dada esta circunstancia y con el objetivo de optimizar los espacios, la estructura perimetral se construyó en tabiques de hormigón de gran altura, que tienen como objeto el sostén del terreno más la impermeabilización del edificio construido bajo nivel.
Las características de la nave, con mucho desnivel de terreno, grandes luces y altura importante, fueron claves para la estructura de hormigón armado, con armaduras de hierro de cuantía importante.
Se destaca también un sistema de desagües, muy importante en la industria del vino. Tanto el local como los distintos elementos que componen el equipamiento, deben ser constantemente higienizados y los desagües deben ser tratados antes de ser evacuados en el viñedo.
Es importante recordar que el cliente necesitaba procesar la uva con premura, por lo que el proceso constructivo debió ser realizado en etapas, dando terminación a una de ellas antes de comenzar otra. En otras circunstancias hubieran sido construidas en simultáneo.
El segundo sector es el sector para atención al público, generalmente turistas. Tiene una importante sala de recepción, un sector de restaurante y cocina, y una gran galería orientada hacia las impresionantes vistas del valle y los viñedos.
Los turistas pueden realizar una visita guiada por la bodega, pasando por los distintos pasillos y observando el proceso de industrialización, como también el de embotellado y almacenamiento. Un lugar muy particular lo constituye la sala de barricas, donde el vino reposa en barriles de madera. Se tuvo en cuenta la temperatura en que debe mantenerse y se observaron también los detalles, como paredes de piedra labrada con junta tomada, un pasillo aéreo sobre piso de madera, con herrería artística y pisos coloniales.
Esta parte cuenta con numerosos detalles de terminación como molduras, rejas de hierro forjado, grandes ventanales y balcones.
La cubierta de techos del sector turístico está hecha de chapa en un sector que no se ve, más una cubierta de tejas coloniales a la vista, sobre tirantería de madera trabajada. Los desniveles se salvaron con canteros y escaleras construidos en piedra a la vista, con junta tomada, constituyendo un conjunto de tejas, madera y piedra muy armonioso.
Se tuvieron en cuenta todos los detalles. Fueron cubiertas todas las necesidades tanto del sector turístico como del sector industrial.