Conversaciones by Flor Zumaeta
En tiempos de intensa revolución interna, por lunas llenas cargadas de energía, por estrés pre y postelectoral, la cercanía del fin de año, lo cotidiano del día a día hacen que me pregunte ¿qué es la felicidad? ¿cómo la sentimos en nuestro ser interior? ¿nos atrevemos a ser felices? Y así, comienzan a brotar de mi interior muchas preguntas sobre la FELICIDAD.
La felicidad, ¿qué es? ¿La felicidad es viajar por el mundo, tener el mejor auto estacionado en la puerta de casa, la mejor ropa, los últimos zapatos de cual o tal marca, la casa de tus sueños? ¿Es realmente eso la felicidad?, me pregunto mientras comienzo a volcar en la computadora las ideas que vienen dando vueltas en mi cabeza sobre este sentir.
Desde mi sentir, desde mi vivir afirmo que no, la felicidad es otra cosa, la felicidad es más simple. Es contar con salud, trabajo y un hogar que me invite a los abrazos más largos y reconfortantes, en donde el desorden (medido) indique una casa vivida y disfrutada. La felicidad es poder contemplar un amanecer y poder agradecer; es contemplar el mar y sus olas furiosas que rompen para encontrar la calma en la orilla, a mis pies. Es correr por los cerros y sentir que puedo tocar el cielo con las manos. Es escuchar un tema en la radio y reír por los buenos recuerdos que me trae. Es disfrutar de mi trabajo, es escribir para ayudar a sanar un alma revolucionada.
La felicidad es esto y más. Es un estado de ánimo en el que las personas nos sentimos plenamente satisfechas por disfrutar lo que deseamos. O bien cuando creemos haber alcanzado una meta deseada. Un sentimiento que nos acerca a nuestro bienestar. Un conjunto de emociones que mantenidas en el tiempo, producen cambios en nuestro cuerpo y en la mente, este estado se asocia a vivir plenamente y en buen estado de salud.
Si en este momento salgo a la calle y le pregunto a diez personas distintas voy a obtener diez respuestas diferentes; porque cada uno de nosotros sentimos de manera distinta la felicidad. Sentimos y vivimos. Muchas veces necesitamos una caída fuerte al abismo para resurgir y comenzar a valorar aquello que tenemos, y es allí cuando podemos palpar la felicidad y más aún nos atrevemos a vivirla.
Google dice que es un estado de ánimo de la persona que se siente plenamente satisfecha por gozar de lo que desea o por disfrutar algo bueno. Wikipedia afirma que la felicidad es una emoción que se produce en un ser vivo cuando cree haber alcanzado una meta deseada. ¿Ven? Muchas definiciones para muchos sentires de la felicidad. Porque de eso se trata también, atrevernos a ser felices con nosotros mismos, con lo que tenemos, con nuestros sueños. Animarnos a vivir y disfrutar, sin pensar en el qué dirán o cómo vive el otro su felicidad y muchos menos intentar imitarlo. Porque la felicidad de Juan no es tu felicidad. La de María tampoco es la tuya, y así.
Quiero compartir con ustedes pequeños hábitos que podemos incorporar a nuestra vida para ser más felices: no dejar que el futuro se adelante al presente, ser seres íntegros siendo nosotros mismos, te cuidás, te amás y te das ánimos, evitás victimizarte, sociabilizá sin buscar la aprobación del otro, no te rechaces, buscá conseguir todo lo que deseás, perseguí lo que soñás, creé en los cambios y luchá y ganá las batallas, conectate con el presente y viví en el momento. Buscá cinco minutos al día para conectarte, meditar, respirar y exhalar. Solo cinco minutos para conectarte con tu felicidad, porque de eso se trata permitirnos nuestra felicidad en esta vida. Aquí y Ahora.
Flor Zumaeta – Lic. en Comunicaciones – Facilitadora de Bienestar – Coach en PNL – Máster en PNL
Teléfono: 3874835362 – Mail: florenciazumaetahotmail.com – IG: florenciazumaeta – Fbk: Momentos de Bienestar