Agustina Burchmann, la creadora y diseñadora de la firma de accesorios e indumentaria Shibinda, conversó con revista abc sobre los inicios de su marca, la pasión con la vive cada emprendimiento en el que se embarca y la visión de sus proyectos a futuro. ¡No podes dejar de leer esta entrevista!
¿Cómo nace la idea de Shibinda?
Surgió en Córdoba capital, cuando yo tenía 21 años. Todo se fue dando, paso a paso. No es que dije quiero crear una marca y lo hice, una cosa llevo a la otra… comenzó siendo una marca de accesorios, hoy es de indumentaria y accesorios.
Todo fue por una necesidad, tenía un casamiento y se me puso en mente un par de aros, los buscaba en el mercado y nos los conseguía, y dije me los hago yo. Fui al local donde venden insumos para el armado y me cope comprando todo para armar.
Empecé armándome accesorios para mí, después para amigas, hasta que una señora que tenía un local muy lindo me dijo: “ponele una marca, etiqueta y te los compro” Y ahí pensé esto puede ser un negocio, en un día hice el logotipo, nombre y etiquetas (soy diseñadora gráfica así que yo sola hice toda la identidad visual). Le vendí a ese local, y me acuerdo que quise ir por mas, un día me arme un stock y salí a buscar locales, fui a 3, me presenté, les mostré lo que hacía y fracase. Me súper frustre… y dije esto no queda aquí… seguí insistiendo hasta que logre otra clienta, y empecé hacer cada vez más diseños, mi cabeza no paraba, volvía de la facultada y estaba todo el día armando, fines de semana, pasaba de largo, cuando me acostaba a dormir se me ocurrían ideas y me levantaba para anotarlas, hasta soñaba con diseños me despertaba y los hacía, me encantaba y jamás pensé en números, o ver la parte comercial, sólo quería diseñar y armar.
Empecé a participar de ferias de diseño los fines de semana, ahí conseguí más clientes mayoristas, hasta q me llamaron para participar en la feria Puro Diseño que se hacía en Buenos Aires, participé 3 años consecutivos, y ahí conseguí clientas en toda la argentina. El tema de las ferias me encantaba porque veía las reacciones de las clientas, que tenía mucha aprobación, y eso me daba muchas pilas para continuar. Sentía adentro mío mucha adrenalina, ganas, pasión.
En 2011 abrí mi primer local con mi marca de accesorios y compraba marcas de ropa, zapatos, carteras, lencería, ya que siempre me gusto todo el rubro de la moda. Por suerte fue un éxito, y amaba ese feedback con la gente. Eran constantes las ganas de superarme, de ir por más… siempre quise empezar hacer ropa, pero no conocía talleres, ni el mercado.
Siempre ame Buenos Aires, algunas amigas se habían mudado ahí, me empezaron a llamar y contáctame modelos, asesoras de imagen y productoras para vestir, que querían la marca. Hacía todo a distancia les mandaba cajas con los accesorios, y así comenzó a moverse todo, se recomendaba la marca de boca en boca, a través de Facebook llegaba a muchos lugares, comenzó a aparecer el Instagram.
Hasta que me empezó a picar el bichito de irme a vivir a Buenos Aires y lo decidí, busque una encargada a la que estuve enseñándole todo, sabía que tenía que empezar de cero. No me importó nada, confié en las sensaciones y pasión que tenía, no fue fácil porque tenía que darse todo en forma simultánea, desde donde vivir yo, donde abrir el taller, armadoras, capacitarlas, y no podía dejar de producir un mes porque tenía mucha demanda. Fue durísimo todo el cambio, la mudanza.
Ya en el 2014 abrí mi primer taller y showroom minorista, para la inauguración convoque e invite a modelos y productoras que vestía y me venían acompañando y gracias a las redes sociales y el boca en boca cada vez me empezaron a llamar de más lugares.
El tema de la marca de ropa siempre estuvo latente, en el 2016 largue mi primer colección de 6 artículos, y cada temporada fui animándome a más, en este invierno hice más de 50 artículos, y ¡voy por más!
¿Cómo fueron los primeros pasos emprendiendo en el diseño, sentís que te costó instalarte?
Diría que fueron dos comienzos diferentes, el primero con accesorios fue parte de una necesidad y hobby, no me costó ya que todo se iba dando. Y el segundo, fue cuando empecé a incursionar en la indumentaria, ya instalada en Buenos Aires con la marca afianzada. No fue fácil, lidiar con talleres, proveedores, un mundo nuevo con mucha competencia que es Capital. De cada error fui aprendiendo, soy muy intuitiva y observadora y un paso que daba se me abrían más puertas, y así fui dando pasos, confiando, muchas veces me equivoqué y dije por aquí no va, aprendí y seguí… pero te vuelvo a repetir, fue flueyendo, porque todo siempre lo hice con mucha PASIÓN, que es el motor que me impulsa a realizar mis sueños, a arriesgar, a entregarme. Sabía que iba a ser difícil instalarme en Buenos Aires, que había mucha competencia, pero mucho no me importó, confié mucho en mí, en lo que podía hacer, más que miedo tenía mucha adrenalina.
Contanos sobre tu experiencia de emprender con varios locales en el país.
Como todo, se fue dando, por demanda, pasión, amor y dedicación. Nunca pensé que podía vivir en un lugar y tener un local en otra provincia, hoy con la tecnología y aprendiendo a delegar se puede. Primero fue el de Córdoba en el 2011, luego en el 2014 me mudé a Buenos Aires, donde abrí el taller para accesorios y la oficina. Además abrí un showroom donde vendía por menor y fue algo muy loco lo que paso, me lleve una gran sorpresa! En pleno verano con un calor, la gente hacía 2 horas de cola porque el local explotaba, fue algo imprevisto! todo me empezó a quedar chico, fui poniendo más vendedoras, ya no entrábamos más, así que en el 2016 abrí otra oficina para mayoristas y de productos.
Siempre amigas me decían ¿por qué no abrís en Santiago? Hasta que mi hermana Júlia me dijo lo hagamos y ahí confíe en ella, sabía que lo iba a manejar muy bien, nos asociamos y abrimos en Abril del 2017 Shibinda en Santiago y por suerte nos va muy bien. En Buenos Aires ese mismo año abrí otro local en Palermo Soho ya que el de Recoleta me quedaba muy chico. Y por suerte cada día voy por mas, gracias a la tecnología hoy es más fácil chequear los locales, estar en el día a día en cada detalle.
¿Por qué la elección de Shibinda como nombre de la marca?
No la pensé mucho, como conté anteriormente, yo armaba accesorios para mi, hasta q una mujer q tenía un local me dijo ponele una marca. Ese mismo día hice un listado de posibles nombres, busque en Google Earth lugares en el mundo, busque por África (ya que en esta época tenían una onda africana los accesorios) y había un volcán que se llamaba TSHIBINDA me llamo la atención y me gustó, le saque la T y quedo Shibinda. Estaba entre varios posibles nombres, mande el listado a amigos, hice votar a todos y era el que más gustó, y así fue.
¿Cómo es el trabajo en redes sociales?
Soy una persona muy observadora e intuitiva, y fui analizando que se vendía, porque, de donde conocían la marca, y me di cuenta que Facebook en un comienzo y luego Instagram era una herramienta muy poderosa para llegar a muchos lados y dar q conocer la marca. Me dije esto hay que explotarlo y seguí por ahí, me hice muy fuerte en redes sociales, viendo que fotos gustaban más, la gente pedía más fotos de looks. De repente uno está en su oficina, casa y desde el celular o computadora ve lo nuevo que entro y es un gran llamador. Las clientas llegaban al local con el celular mostrando el look que querían. Imagínate que llegue q Buenos Aires y no conocía a casi nadie! Fue todo por el boca en boca y redes sociales. Siempre lo maneje yo, pero ahora lo hace un equipo de marketing que me entiende a la perfección la forma que yo quiero que se maneje, soy muy exigente en cada detalle.
Hablanos un poco de la identidad o estilo que quiere transmitir la marca.
Shibinda transmite frescura, diseño, identidad, feminidad. Algunos accesorios y prendas tienen una particularidad que se pueden usar de muchas maneras, reinventándose todo el tiempo. Es alegre, apuesto mucho al color, texturas y formas siempre!
¿Cuál es el tipo de mujer a la que queres llegar?
La mujer independiente, libre, con espíritu de vanguardia, femenina, sofisticada y divertida.
¿Quiénes son tus referentes en este ámbito?
En Argentina soy fan y consumidora de Jazmin Chebar y Rapsodia. Y diseñadores de afuera Me gusta mucho Free People, Yves Saint Laurent, Zara.
¿Cuáles son tus desafíos laborales en el corto y largo plazo?
En el corto plazo, ampliar la línea de producto, ropa urbana, zapatos, traje de baño, perfume, y fabricar en india. Abrir más locales y franquicias en el pais.
En el largo plazo, ser una de las primeras marcas renombrada del país… exportar y porque no tener locales en New York y Paris, sería un sueño! Voy por todo!